martes, 30 de junio de 2009

...CREER...



Noche cerrada.
No hay luz, no hay ruidos.

Silencio y oscuridad.

En tu cuna abres los ojos de par en par.
Alargas el brazo. Buscas, buscas...

Oscuridad. Silencio.

Es infinito el brazo que busca alcanzar la luz.
El corazón que late a todo tren se ensancha en la esperanza.
Las lágrimas del miedo se convierten en energía vital, desesperada.

El brazo, más lejos.
La oscuridad, más densa.
El silencio, atronador.

Una búsqueda, una esperanza, una necesidad...
Querer encontrar ese alguien que te consuele,
que te proteja,
que te de seguridad.

Sabes que hay algo,
que ese ser protector está ahí.
Aunque no lo veas, está ahí, en el infinito.
Estás seguro,
a pesar de estar inmerso en el pánico de la noche,
en el vacío de la soledad,
en el vértigo del miedo.

Estás seguro.
Crees, sí, crees.
No puedes dejar de creer porque sino
morirías.

__________________________________________

Años más tarde descubres
que toda tu vida
ha sido un inmenso esfuerzo
para alcanzar a esa persona.
Y que la fe, se te ha impuesto.
Que tu relación con ese Dios
tiene su origen en esa mano ausente,
en ese esfuerzo por tocarlo,
por sentirlo, por amarlo.
___________________________________________

Yo quiero estar ahí, al otro lado, para tí, mi niñ@.
Quisiera que tus esfuerzos, que tu búsqueda, no tengan que ser infinitos.
Que tu mano me encuentre,
que tu angustia se calme.

Y así, agarrando tu manita en mi mano
poder mostrarte, allá, a lo lejos,
que hay un más allá posible.
Que el calor de mi mano, que la seguridad de mi fuerza,
son simples indicios de lo que existe allá
y
en tí.



.

lunes, 8 de junio de 2009

EL " CHIVO EXPIATORIO "


Eres como un pararillo mojado después de una tormenta,
¡tan frágil!
O como un galgo perdido, errante,
¡tan delgado!

Te pasas la vida jugando,
te impides crecer.
Prorrogas tu infancia indefinidamente,
me pregunto si alguna vez querrás ser adulto.


Te agarras, te incrustas.
Buscas atención, juego,
mejor imagen.
Te va la vida en ello.


Me regalas una sonrisa de oreja a oreja
cuando te dedico un poco de tiempo.
Cuando en mis palabras te sientes otro
y aprendes a soñarte de otra forma.

Pero...

Se te muere esa sonrisa cuando la ves.
El alma te cambia de color.
El miedo se incrusta en tus ojos.

Es tu madre.


Ya no intentas ocultar la verdad.
En tus palabras se escucha resentimiento y resignación,
¡impotencia que me remueve las entrañas!

Tu lógica, diferente.
Tu mundo, único.
Maravilla en la que te encierras
ante el cruel ataque.
No comprendes la razón,
no la hay.
Y buscas un gigante amable
a la sombra del cual sentirte menos sólo.



Me asombra tu dificultad para pedir amor.
Confundes los términos y te dan lo contrario.
Golpes por caricias,
indiferencia por atención.

¡Das tu vida por un minuto de existencia en la mente de otro!

Y recibes más y más golpes.
De la madre, de los otros...
Tu mundo se limita a encajar amenazas,
palizas y burlas.
"Parece que le gusta" me dicen.
"Es lo único que conoce" pienso.

Y como telón de fondo
el incesto.
El abuso como lazo de unión con ella.
El dolor, lo que tú le recuerdas.
El mismo agresor, su padre.

Las mismas consecuencias:
melodía encadenada de sufrimientos,
de abandonos, de rechazos...

viernes, 29 de mayo de 2009

¡¡OGROS!!





Eliges, (¿eliges?)
ser odiado.
Prefieres, (¿prefieres?) ser temido.

Ojos, rojos de furia, mirando.

Palabras amenazantes, gestos intimidantes.
Prometes violencia,
vomitas insultos que hacen daño, mucho daño.

Eres el ogro temido,
el que la gente evita en la calle,

el que es mejor no despertar, no provocar.


Creas a tu alrededor un ambiente de miedo.

Nadie osa hacer un ruido o llevarte la contraria.

Explotas cuando menos se espera.

Eres un experto en crear decepción
.

Vivir contigo es vivir alerta.
Porque cualquier cosa puede malinterpretarse,

sentirse como una afrenta,

o quizás

como un abandono.


Porque, detrás de ese disfraz
existe un hombre débil.
Sí, débil.
Porque la violencia es fruto de tu impotencia,

de tu miedo,

de tu fragilidad.


Tienes miedo.
Sí,
mucho miedo.

De la claridad radiante de la verdad,

de los colores vivos del presente,

de los sueños enterrados en el pasado.


Estás herido.

Como la bestia atravesada por la flecha
te debates.
Lo destruyes todo
porque sientes un escozor en el alma,
un enorme vacío en el recuerdo.




Me siento impotente.
Quisiera lavar tus heridas,

poner un poco de bálsamo en tus yagas.

Pero tan sólo aceptas mi silencio cómplice

testigo de tu infelicidad.



Sólo queda intentar apaciguar tu cólera
con el agua viva de la esperanza.

sábado, 23 de mayo de 2009


Cuerpos entrelazados.

Bocas temblorosas que se besan.
Lenguas que se cruzan, que invaden espacios infinitos,
que rozan y devoran.

Labios que se muerden, desesperados, ante tanto sentido.
Dientes que descubren placeres insospechados.
Saliva que es miel regalada.

Manos que recorren todo, sin secretos, sin miedos...

Mirada que atraviesa, decidida, entregada.
Ojos en los que mirarse,
espejo límpido en los que ver el deseo.
Párpados que se cierran para sentir mejor.
Conciencia concentrada en milímetros.

Estallido.
Incendio inextinguible en la piel .
¡Cada contacto, cada roze quema más!

Rictus extraño en el rostro,
acto reflejo, respuesta instantánea, mueca irrepetible.

Sudores mezclados, pieles resbaladizas,
sal bebida, lamida...

Movimientos espasmódicos de un cuerpo que ya no te pertenece,
que obedece, que ordena...
Simbiosis perfecta.

lunes, 27 de abril de 2009

"¡Angustias!"


"¡Angustias!" La llamas con una sonrisa en los ojos,
con la ternura rebosante de buen humor.

Se queja de sus dolores.
Cuando te oye hasta se le pasan
y una sonrisa se asoma a sus ojos casi ciegos.


Angustia. Lo que tú sientes cuando la ves tan viejecita,

cuando piensas que el día menos pensado se te va, se nos va.
Y la mueves, la incitas a pensar, a leer...
Con una paciencia infinita te explicas
hasta que la luz se hace en su memoria, en sus recuerdos.

Y eres tan feliz cuando ella es feliz...


Te emocionas hasta las entrañas cuando la llevas a misa

y sus amigas se le echan encima
con esos besos sonoros,

con palabras suaves, con tanto cariño.


Y te enfadas cuando se empeña en seguir barriendo, fregando, limpiando.

Vuelves a ella
y le das un beso sonoro.

Con cuidado, con mucho cuidado
la pones guapa,
la peinas,

la perfumas.
Con tu mirada la acaricias.
Como a una de esas vírgenes que tanto te gustan
la haces hermosa,

¡te sientes tan orgulloso!


La elevas en un pedestal de amor.

La envuelves entre algodones de ternura.

Y la paseas en su silla de ruedas,
como en procesión
para que los demás la admiren.


Es una parte tan importante de tu vida,

porque sí, porque es así, no lo has elegido.

Se te ha impuesto ese amor puro,
sin límites.

Te olvidas de tí.
No quieres pensarlo.

No te proteges
del tiempo ineluctable.

Y veo esa sonrisa infantil en su rostro
marcado por los años

cuando te oye decirle:
"¡Angustias!"


A todas esas personas que no miden los esfuerzos que hacen por los más mayores.

lunes, 20 de abril de 2009

BENDITA



Cada noche antes de acostarse
besa la imagen de la Virgen
que le traje de uno de mis viajes.


Imágenes de Cristos, Vírgenes y Santos invaden la casa,

las repisas,

encima de la televisión,

las paredes.


Fe inocente, casi infantil.


Creencias de otro tiempo
que dan sentido a su vida

y a sus sufrimientos.


Fe crédula, manipulable.

Pero Fe que la sostiene.


Me preguntas si está bendecida.

Yo pienso...
eres tú la que la bendices

con tus besos de madre
de hijos pródigos.

No hace falta ni cura ni agua bendita.

Eres tú la que con tu amor,
sencillo e inocente
le das la bendición más auténtica.


Tus labios besan el metal
como si besaran las mejillas calientes
de esos hijos
que son tu vida.

Y te quedas feliz,
como si unos labios invisibles te devolviesen el beso,

la caricia desde lejos...


Y dices mirando al vacío,

con tus ojos medio ciegos:

"buenas noches".

Y yo siento,
en la distancia,

el calor suave de ese beso,

y la cercanía eterna de la madre.

domingo, 5 de abril de 2009

EVANGELIO

Foto: Calvario en Bretaña. Autor: Jesús


Mc 14, 34; 50 "Siento una tristeza mortal, quedaos aquí velando (...). Lo abandonaron todos y huyeron"

Desilusión de un hombre que un día creyó.
Angustia de un idealista incomprendido.
Lágrimas de un revolucionario fracasado.
Lucha interior de un pacifista torturado.

¿Buena noticia?
¡Pobre!
¡Iluso!

Mueres de tristeza porque te han abandonado.
Todos, ¡todos!

Ironías de la historia,
hoy, es lo mismo.
Tu mensaje de fracaso sigue siendo actual.
Los que se reclaman "depositarios" de tu palabra la han olvidado.
Buscan, como los que te condenaron, sus intereses.
Tener influencia y manipular conciencias.
Controlar al ser humano.

¡Qué tristeza más grande!
¡Qué contradicción más odiosa!
¡Qué traición más cobarde!

Hoy, aún siguen transformando tu mensaje según sus intereses.
Hoy,
peor,
continúan traicionando, condenando a los que no son como ellos quieren.
Y siguen sordos. ¡No te oyen!

Te dejan sólo.
Te han olvidado.
No te han visto en esa masa de excluidos (por ellos).
¡Mejor!
Así, por tu propio camino, sigues acompañando al ser humano
maltratado, humillado, excluido, condenado...


Me miras a los ojos y sonríes.
No tienes Iglesia,
no tienes poder, ni influencia...
Tu sonrisa se hace aún más luminosa, más amplia.
Eres LIBRE,
te inclinas hacia mí y me acaricias.
LIBRE.
Nadie, nadie, puede encerrarte. ¡¡¡NADIE!!!

lunes, 30 de marzo de 2009

¿MERECE LA PENA?

Foto realizada por Jesús. Título: "Orante en Saint-Jean-l'Evangeliste, Paris"


Pagas un precio,
¿merece la pena?
Hipotecas tu vida,
sacrificas tus ganas,
vendes tu alma
simplemente para que los otros te quieran,
simplemente.

Narcisismo herido del que siempre deseó ser amado
y que sólo lo consigue en un sueño,
en un instante,
en una oración.

Actúas igual que un actor aficionado,
¡pobre actor!.
Te exhibes como una prostituta en cualquier esquina,
¡pobre puta!.
Te niegas por treinta monedas como un vulgar Judas,
¡pobre Judas!
Y sientes, que a pesar del precio,
a pesar de las apariencias
tu alma sigue siendo un desierto,
tu soledad está aún más encerrada
en ese mundo de ilusiones vanas,
de falsas sonrisas,
de discursos ya preparados.

Te prohibes pensar.
Adhieres ciegamente a los dogmas que "Ellos" te enseñan.
Y todo para que te quieran.
Todo para tener la impresión de formar parte de un grupo,
de una Iglesia,
una "familia".

¡CARO es el precio que pagas!
ENORME el sacrificio que haces.
Tu VIDA, ¿no es éso lo que importa?

Quizás no.
Quizás, lo que tú buscas es
no sentir el viento helado de la soledad,
no vivir el riesgo amargo de la libertad,
y estar seguro,
en ese vientre materno ultrajado
por tanta mentira,
tanta manipulación,
por pura hipocresía
y miedo,
y poder...

viernes, 20 de marzo de 2009

Círculos

Foto: yo



Círculos concéntricos alrededor de un misterio.
Vueltas y vueltas de tornillo sobre un elemento fundamental:

una imagen en la más tierna infancia,
una caricia no sentida,
una mano ladrona,
algo que me falta...

Cualquier cosa,
por insignificante que parezca,
puede ser el nudo alrededor del cual gira la vida.

Inexorable.



Es la misma piedra en la que caigo una vez,
y otra,
cuando el guardián duerme,
cuando el vigila de mi consciente está ocupado en el vivir cotidiano.



Pigmento repetitivo y totalmente inconsciente que ha dado a mi vida el color que tiene.


Razón no confesada que me ha llevado a elegir un rumbo,

a recorrer un camino,

a escojer una persona,

a odiar, sin saber por qué, tal o tal cosa...


Búsqueda de "mí" llena de sentido. Eterna.

miércoles, 11 de marzo de 2009

Mi planeta Martos...

Foto: Renan Larzul

Universo denso, espeso.
Mezcla de átomos imbricados que forman una masa compacta.
Seres interdependientes que interrelacionan para huir de la soledad, para crear una falsa sensación de autosuficiencia.
Sensación de asfixia, de ya visto... pero que conforta, que pacifica y que, al mismo tiempo, somete.
Cercanía excesiva que repele la novedad, que promueve el conservadurismo.
Religión estrecha en la que el libre pensador es reo de muerte.
Lenguas emponzoñadas porque "si el río suena..."

Y sin embargo, hay como una nostalgia, como un dolor en mí cada vez que debo dejarte.
Quizás porque no te sufro día a día y porque en tí creé mis cimientos.

Estás en el fundamento de todo lo que he llegado a ser, de lo que soy, de lo que seré.
Vives en mí.
Aún oigo tus cohetes,
huelo tu olor a aceite,
vibro con tus tambores de viernes santo...


Creo que te quiero.
Sí, te quiero porque eres mi pasado.
Y cada vez que voy a verte,
que contemplo tu plaza,
tus calles blancas, estrechas y empinadas, es un retorno al pasado,
un viaje al presente no realizado.

Mi niñez se quedó contigo, mezcla de altares y de sueños de libertad.

Tuve que irme, tuve que abandonarte para poder existir.
Yéndome, me uní para siempre a tu recuerdo, a tus olores, a tus olivos...
Tu masa me ahogaba, la interdependencia era mi muerte, la autarquía de tu comunidad, mi hambre.
Me fuí para poder realizar mi sueño,
¡puro pretexto para el encuentro conmigo mismo!

Tuve que matarme, hacerme el harakiri para poder resurgir de las cenizas de mi tristeza.
Y hoy, lo conseguí, soy un hombre.
Libre, fundamentalmente libre.
Y con un amor clarividente
hacia esas calles empinadas,
esa peña,
ese cielo,
ese aire...

lunes, 2 de marzo de 2009

LOS OTROS


Les necesito. Me rodean por todas partes.
Nunca me podré desembarazar de ellos.
Me son indispensables. Les odio. No puedo vivir sin ellos.
Incluso les debo la vida.

Me han condicionado, dirigido, alegrado, defraudado...
Si miro en mi historia, siempre han estado ahí aunque no haya querido verlos.
Son los fantasmas decisivos en mi realidad,
los seres reales, los existentes que han determinado mis fantasías.

Sus Ojos, sus miradas,
sus Bocas, sus palabras,
sus Gestos...
Y en frente,
los míos. En comunicación permanente. Yo dependiente, ellos demoledores.

La nuestra, una historia de amor y odio.
Una lucha de contrarios en un campo de batalla que es mi interior.

Son los OTROS,
esos semejantes a los que tanto me une y de los que tanto me aleja.

OTROS...¡yo también formo parte!
Es difícil estar y no estar en un mismo conjunto. Dentro y fuera a la vez.
Y sin embargo es real. ¡Qué locura!

¿Cómo juzgar, opinar, condenar o absolver si, al mismo tiempo, soy juez y acusado?
¿Cuál es mi defensa?
¿Por qué voy a ser yo mejor que el resto de esos "OTROS" de los que, a pesar mío, formo parte?

¿Cómo mirarlos? Odio...Piedad...Desazón...
¿Cómo mirarlos? Comprensión...Desprecio...Esperanza...
¿Cómo mirarlos? Ternura...Pesimismo...Amor...

¿Cómo mirarme?

¿COMO MIRARME?

viernes, 27 de febrero de 2009

Lloro (casi) sólo





Noche del viernes. San Viernes. La mayoría de la gente que conozco se preparan para salir a tomar algo, cenar con los amigos o ver una peli o serie en la televisión.

Hoy, he elegido estar sólo. Me apetece.


El violoncelo suena como música de fondo. Lo escucho muy a menudo.
Cuando quiero abrir las puertas y ventanas de mis sentidos, cuando quiero escribir, llorar o rezar me pongo esa música de violoncelo.

No me canso. Me acompaña en una melodía en la que yo también soy intérprete.
Lo que siento, escribo, rezo o lloro forma parte del mismo concierto que esa música de violoncelo de Bach.
Me convierto, durante unos instantes, en artista. Formo parte de una obra de arte que se cristaliza en mis venas, en mi estómago, en mis ojos.

Siento un escalofrío en mi espalda. Hay una lágrima que se desliza por mi cara y que no intento parar, que dejo correr, libre.
Baja lentamente (la dejo, ¡estoy sólo!) hasta que muere en los labios, en mi boca.
Me encanta el sabor amargo de las lágrimas, de mis lágrimas.
Me gusta bebérmelas, saborearlas. Quizás bajen de los ojos con la pena disuelta en su interior, como si esa sal fuese el exceso de sentimiento. Provocado por Bach, por lo que estoy escribiendo, por un sufrimiento, o pena, o recuerdo...


La música sigue escapándose de los altavoces. Es como si el violoncelo siguiese su propio lloro de notas. Tan libres, tan hermosas...
Los acordes suenan reales. Es lo único que existe ahora, aquí, conmigo.

Es como si alguien estuviera tocando a mi lado. Sólo para mí. Se oye el crujir de las cuerdas, las vibraciones...

Tiene algo este instrumento que me arranca escalofríos, gemidos, sentimientos tan encerrados, tan ocultos... Es imprevisible, inestable pero ¡tan hermoso!

Sí, llorar es hermoso. Liberarse de lo que nos excede es todo un arte. Nuestra propia congoja, un concierto de violoncelo. Y la paz, la libertad las encontramos tras las cortinas de agua que nos han inundado aunque sólo hayan sido segundos.

Y los ojos limpiados por esas lágrimas purificadoras están de nuevo listos para seguir con su ardua tarea de ver, absorber, conservar en la memoria tantas imágenes...

domingo, 15 de febrero de 2009

¿EXTRANJERO?

Destierro, lejanía, extranjero...
Añoranza, nostalgia, regreso...

Hay días en los que el regreso me obsesiona. Siento añoranza de mi propia lengua materna, necesito oir y hablar el castellano. Las cosas me parecen más sencillas en mi lengua, como más claras, más mías.

Otras veces, estoy tan feliz aquí, que hasta me olvido de la lengua que hablo.
Paso del francés al castellano con tanta naturalidad que ni me doy cuenta del idioma que utilizo. Viajo entre las dos lenguas como en un sueño.
Me dejo llevar por la suavidad de una, me arrebato con la pasión de la otra. En mi interior las lenguas desaparecen y confecciono un lenguaje propio, mezcla y, al mismo tiempo, totalmente original.


Soy consciente de que estoy entre dos culturas. Intento descubrir lo mejor y lo peor de cada una de ellas. Veo cómo, en mi carácter, las dos dejan su impronta. Cada vez soy más francés, aunque también, con el paso de los años, mi identidad de español se refuerza.

Vivo una contradicción contínua y no logro tomar nunca la decisión del regreso.
Estoy en tierra de nadie, con el corazón dividido entre los sonidos directos y algo guturales del castellano y la delicadeza, la artificialidad del francés.
Sentimientos que se mezclan en mi interior, que provocan convulsiones, explosiones a veces.
Me debato entre una, la mía, la de mi infancia, mis sueños y mis frustraciones
y la otra, la aprendida, la de mi hoy, en la que me defiendo, me analizo...

NO, no estoy en tierra de nadie. Es mi síntesis, mi realidad.


Es mi presente, ¡tan lleno! Mi vida, ¡tan mía!, sí, ¡mía!
Porque todo lo he creado yo, todo lo he elegido yo. No hay amigos de infancia. Cuando me paseo por estas calles no hay recuerdos que superen los 12 años.

Es quizás éso lo que hace que no pueda dejar ésto, mi presente, para regresar a una España, adorada, pero que se quedó allá, en el 1994.

Me doy cuenta de que he necesitado romper con todo mi pasado para construirme un presente auténticamente mío. No vivo en Francia ni en España, vivo en el universo que yo me he construido. Por supuesto basándome en mi cultura, en mis raices, en mis creencias...

Descubro que mi mundo es mucho más amplio que el país en el que vivo. Es como mi acento, inidentificable.
Al final creo que he llegado a hacer realidad mis juegos de niño. Cuando me imaginaba, dibujaba paises inexistentes, en los que todo era a mi medida. Yo era el soberano de un país en el que todo era bueno. Todo lo necesario estaba presente en esos mapas inexistentes excepto en mi imaginación.

Todos mis viajes, los paisajes impresionantes, las gentes conocidas y amadas... Vivencias de un apátrida porque mi país, lo llevo dentro de mí.

Es mi España querida, son los olores y colores de mi infancia, el olor a incienso, el verde olivo...
Es la selva -casi virgen- africana, la soledad en una cultura totalmente extraña...
Es la búsqueda, en una fría Europa central. La espiritualidad de las montañas, el encuentro con mi yo profundo.
Es la sabana africana, el polvo del Sahel, los ojos impresionantes de esos niños que me pellizcaban la piel diciendo: "kuri kuri nemdo" ("piel de cerdo") en el Burkina Faso.
Es la agonía de un desencuentro consigo mismo, el suicidio de un yo idealizado. Y el encuentro con mi propio cuerpo, mis propios deseos... el comienzo del amor.

Y la madurez, por fin, la madurez.

No me extraña que de vez en cuando sienta un cansancio mortal. Tanto recorrido, tanto buscado, encontrado, dejado...

Para darme cuenta de que es mi propio país interior el que estoy construyendo, mi propio presente, mi propia lengua, mi historia.
Foto: yo

sábado, 7 de febrero de 2009

A PESAR DE LOS PESARES


Estoy leyendo un libro de un autor al que descubrí a causa de su apellido: Michel del Castillo.
Un día, en el mercadillo de la plaza St Sernin, compré uno de sus libros.
Es un autor francés con apellido español. Nacido en España, de madre española y padre francés, poco antes de la guerra civil. Su infancia, fué todo un drama marcada por abandonos, hambre, guerras, separaciones, ausencias...

En este libro el autor cuenta la historia de la "no-relación" con su padre.
La ausencia del padre, el abandono, el rechazo, el chantaje...
La primera frase del libro es: "J'ai rendez-vous avec mon assassin. C'est mon père et il s'appelle Michel" que en castellano es "Tengo una cita con mi asesino. Es mi padre y se llama Michel".


Hoy, me he topado con una frase que me ha impactado. Es la frase con la que se cierra el capítulo en el que el hijo accede a ir a ver al padre viejo, moribundo y en la miseria.
El autor termina ese episodio imaginando la futura muerte de su tía, la que le ha cuidado, la que le ha "salvado".

La frase es : "...on s'arrange pour survivre. On s'accommode de tout" que podría traducirse como "nos las arreglamos para sobrevivir. Lo aceptamos todo".


Menos mal que tenemos esa fuerza, ese instinto de supervivencia. Porque hay momentos en la vida en los que todo parece derrumbarse, hundirse.
Menos mal que aceptamos lo irremediable, que nos aferramos a otras cosas, a otras personas para no dejarnos ir nosotros también.
Desde el niño abandonado o huérfano, pasando por los que han vivido traumas, separaciones, abandonos... en sus vidas, todos, de una manera u otra encontramos ese "algo" que nos reconcilia con la vida y que nos permite seguir soñando con un mañana lleno de luz, a pesar de los pesares...

lunes, 2 de febrero de 2009

SIN RESPUESTAS

Son las doce menos cuarto de la noche. Regreso del trabajo. Retomo mi vida privada unos minutos al teléfono, consulto los mails y pienso que me voy a ir a la cama rápidamente.
Sin embargo, hoy no tengo sueño. Me entran ganas de escribir un poco. Escribir sobre mi trabajo, algo que en general no hago aquí.


Tengo la garganta en "fuego vivo". He pasado gran parte de la tarde-noche gritándo a mis monstruos, sobre todo a uno.
Recuerdo lo que pensaba cuando iba al trabajo, en el coche. Me preguntaba si llego a "querer" a los niños con los que trabajo. Les llamo mis "monstruos" de forma cariñosa (quizás para marcar una cierta distancia indispensable). ¿Los quiero?

La verdad es que, en muchos momentos, me las hacen pasar muy mal.
No son niños "normales". Tampoco son disminuidos psíquicos. Incluso, algunos son demasiado inteligentes, más de lo que debieran porque, esa inteligencia, creo yo, les hace sufrir.
A los 14 años algunos no saben ni leer ni escribir. Han "decidido" que los aprendizajes no merecen la pena. Tienen unas dos o tres horas de clase. Otros, como Alex, el que ha acabado con mi voz y mi paciencia esta noche, consiguen ir al colegio. Creo que Alex tiene una inteligencia superior a la media. Sabe muchas cosas. Pero no sabe, no puede saber lo fundamental...


Intentar cenar con ellos (el lunes tenemos 6 para dos adultos) es ya toda una proeza. Raro es el día en que no tengo que "sacar" a alguno de la mesa y llevarlo a su habitación porque es imposible mantenerlo con los otros. Los otros...

Su violencia, el "exceso" de agitación, algo que no controlan... su "locura" les desborda.
Y vienen los gritos y el enfrentamiento con el adulto que "osa" interponerse entre su "omnipotencia" y la realidad. Otras veces es entre ellos. La "autoregulación" de diferentes insoportables.

Muchas veces soy invisible para ellos, cuando me insultan sé que no es a mí... pero al mismo tiempo tengo que hacer algo.

Sin querer substituir a los padres (impotentes ante los trastornos que presentan sus hijos) tengo que ponerle "límite" a esa agitación, esa omnipotencia, esa violencia.

¿Los quiero?

Soy un profesional, intento protejerme con un poco de distancia. De hecho, ésta es fundamental si quieres trabajar con ellos.
Paso de la indiferencia fingida a la cólera del que se siente insultado, violentado.

Soy un hombre, a secas.

Mi trabajo consiste en enseñarles a tomar consciencia del "otro", de los otros, de la sociedad.
Es como luchar por un imposible porque ellos son como un vaso que se desborda, por todas partes. No tienen límites.
Hay momentos en los que solicitan al "padre" cariñoso que puedo llegar a ser, otras veces buscan al protector, otras necesitan que sea autoritario para protegerles... de ellos mismos, de su locura.

Siempre intento acoger, aceptar ... la locura.

La locura de los inocentes porque ellos no tienen la culpa de ser lo que son, de tener los padres que tienen, de estar en el límite entre normalidad y marginalidad.

Creo que es lo que me gusta en este trabajo: nunca sabes lo que van a buscar en tí y desgraciado de tí si te dignas a buscar algo en ellos.
Eres un instrumento en sus vidas, una "cosa" con la que jugar, a la que oponerse, con la que reir también.
Y yo acepto. Mi trabajo es ser instrumento para ayudar, en la medida de lo posible, a que un día sean hombres en una sociedad que no soporta la diferencia.

Me imagino que dentro de unos años habrán desarrollado esa capacidad de adaptación, esa mentira salvadora, que les hará poder vivir en nuestra sociedad engañándonos a todos. Porque seguirán locos, sí, locos. Pero, espero, de todo corazón por ellos, que sepan engañarnos a los que nos creemos "normales".

¿Los quiero?
No hay respuesta. Soy un profesional. No hay respuesta.

Foto: yo, experimentando con la cámara (Bretaña 2008)

viernes, 30 de enero de 2009

SUERTE

Sabes que está ahí.
Forma parte de tí.
El lado oscuro. El abismo. El vértigo. La nausea.
Forman parte de tí.

Son ya muchos los años intentando descubrir lo que hay dentro, tu propio funcionamiento.
Conoces bien los mecanismos que hacen de tí lo que eres.
Hoy, sabes desmontarlos, analizarlos... pero no te puedes desembarazar de ellos.
Forman parte de tí.

Hasta cierto punto, les estás agradecido.
Porque han hecho de tí lo que hoy eres: un ser maravilloso.
Ha merecido la pena.
Todo.
Desde los momentos de éxtasis hasta los sufrimientos que también han ocasionado.

Eres el fruto de tantos años de búsqueda, de tantas lágrimas, tanto.... tanto....
Y al final hoy ves el resultado, hoy eres testigo de que todo ha merecido la pena.
Porque las bases de tu vida son fuertes y estables.
Eso al mismo tiempo que eres un puro relativista (la vida te ha enseñado que ésa es la única verdad,
la que es eternamente cambiante).

Y a pesar de todo o quizás gracias a todo, sabes que la "falla", el talón de Aquiles... está ahí, en tu interior.
Estás condenado a vivir con él, pero la diferencia es que hoy sabes dominar a la bestia.
Hoy tienes la madurez necesaria para ver si empieza a despertarse... y sabes qué hacer.
Hoy, por fin vives el hoy.


El otro día una amiga me hablaba de lo que llaman "étape de la deuxième chance" que literalmente quiere decir: etapa de la segunda "suerte", aunque la traducción es la "segunda oportunidad".
Yo me quedo con la primera traducción, la incorrecta: la suerte de poder vivir esta etapa.

Foto: yo, en Bretaña

miércoles, 21 de enero de 2009

PAJAROS EN LA CABEZA

Intento encontrar un "cordón umbilical" con el momento presente. Sé que es lo único que puede sacarme de mis elucubraciones, mis "masturbaciones" mentales: los miedos que me acechan, los temores, los auto-juicios, la imagen que los otros tienen de mí, la autoestima...

Busco algo que me haga salir de ese círculo vicioso...

Miro a mi alrededor. Intento dejar mi "ensimismamiento" y descubro que lo minúsculo, lo casi invisible, lo no importante es... un "concentrado" de realidad, de "momento presente" que me habla, que me reengancha con el hoy y con el ahora...


Son los pájaros, de todos los tamaños y colores (aunque prefiero los pequeñitos).

Esos pájaros que, al contrario de lo que decimos en la expresión "tener pájaros en la cabeza", me invitan a escuchar ese latido de mi corazón que ya no volverá a sonar, me hacen ver ese segundo pasado en mi reloj, irrecuperable...

Y que me dicen que éste es el único golpe de "sístole-diástole" que para mí existe, el que en este preciso momento está enviando la sangre al resto de mi cuerpo.
Y que me cuentan que éste es el único instante que de verdad es real en mi vida, el que puedo convertir en una experiencia única e irrepetible. Ahora, en este preciso momento...


Continúo mi camino y, sonriendo, agradecido, les guiño un ojo a esos diminutos "bichos" que me traen un soplo de realidad, de vida.
La verdadera.

viernes, 16 de enero de 2009

PEQUEÑO DELIRIO

Un amigo me ha enviado las coordenadas de mi casa, dónde yo estoy ahora mismo:

Latitude 45°52'16.45"N

Longitude 4°46'27.50"E

Y le contestado algo que puede sonar raro, un poco delirante...

La traducción al castellano no es fácil porque en francés no hay diferencia entre los verbos "ser" y "estar". Sólo hay un verbo: "être".

Voy a intentar traducirlo:


Sí, estoy (existo) en la tierra. SOY.

Y tú, tú también estás en la tierra. ERES.

Somos viventes, hombres en búsqueda de ... de SER.

El círculo está cerrado: estamos, somos, queremos SER. Todo está ahí.


Oui, je suis sur la tèrre. Je SUIS.

Et toi, tu es aussi sur la tèrre. Tu ES.


Nous SOMMES des vivants, des hommes en quête de... d' ETRE.


Le cercle est fermé: nous sommes, on veut ETRE. Tout est là.


Foto: yo (en Bretaña)

miércoles, 7 de enero de 2009

Exámenes, exámenes...

En estos últimos tiempos me he dado cuenta de que llevo toda la vida examinándome. Una cosa es la introspección, el análisis (auto o con alguien) y otra es el estar permanentemente sometido a examen. Lo que he descubierto de una forma diferente es esto segundo.
Y también me he dado cuenta de que estoy harto, HARTO.

El "examen de conciencia", el tener que ser el más guapo, el más ocurrente, el más listo, el mejor educador del mundo, el irreprochable, el intachable, el magnífico, el más bueno, el más santo... Menuda presión durante toda mi vida, y lo peor, una presión auto-asumida.

Nos educan con esta mentalidad y la hacemos nuestra. Nos volvemos intolerantes con nosotros mismos, eternamente insatisfechos... Tenemos miedo a equivocarnos, a no ser lo suficientemente...inteligentes, guapos, educados, buenos, trabajadores...

Ya está bien. Ya es demasiado.
Tengo que intentar "deseducarme" para escapar a esta educación perfeccionista y al mismo tiempo imposible.
Porque, a pesar de que sea inteligente, bueno, honrado, guapo (y modesto jeje), trabajador, intachable... a pesar de éso, y quizás sobre todo éso, es que soy un HOMBRE limitado en todo excepto en la capacidad de amar.
El resto no cuenta tanto como me lo han contado desde niño por todas partes (familia, iglesia, escuela, medios de comunicación, sociedad en general). Lo que cuenta es lo que realmente soy, y lo que soy se expresa sólo en la moneda del amor, la tolerancia, la aceptación de sí mismo y de los otros seres humanos.

Es otro propósito para este año: el intentar, por todos los medios, no ser sometido a examen por los otros, y que mi "análisis" no sea un examinar, un auto-juicio, sino todo lo contrario, una oportunidad para ser más yo mismo.

viernes, 2 de enero de 2009

Propósitos de año nuevo


He dejado de fumar, hasta el 1 de Enero de 2010.
A partir del lunes me pongo con el inglés, en serio.
Voy a seguir con mi ritmo de deporte por semana, o incluso intensificarlo (ahora que he vuelto a dejar de fumar va a ser más necesario aún).
Voy a realizar una actividad manual, como por ejemplo pintar la cocina (que ya lo necesita hace tiempo).

Y sobre todo,
voy a intentar vivir el momento presente de una forma diferente,
más intensa, más real.
Para ello voy a pararme las veces que haga falta a sentir el calor del sol sobre mi piel,
o el frío de una mañana de invierno,
o la gota de agua de lluvia que me corre por la mejilla...
Voy a aceptar que mis amigos me quieren pero que no necesitan demostrármelo en cada momento,
voy a dejarles libres, porque los quiero y el verdadero amor LIBERA.
Voy a aprender a decir lo que siento,
a sentirme independiente de lo que los otros puedan pensar o no de mí.
No necesito a nadie porque tengo a los esenciales.
Soy CAPAZ de amar, soy amor, y eso me basta.
Estaré atento porque se que me equivocaré, sé que haré sufrir...
Perdonaré a los que me hagan daño, pero sobre todo
me perdonaré a mí mismo cuando sienta que la exigencia que me impongo me hace daño.

Amaré (ya lo he dicho)
pero sobre todo me amaré a mí mismo.
Ya lo dice la Biblia:
Amarse a uno mismo,
amar al prójimo,
amar a Dios.
Y es por este orden, riguroso orden:
uno mismo,
el otro,
Dios.
Porque si uno no se ama a sí mismo
no es capaz de amar al otro que ve todos los días y ni mucho menos
al OTRO que no ve.

Tengo 365 días para intentar ser más feliz, más consciente, más real...

Cosa linda...

En estas fechas todos recibimos mensajes de amistad, de buenos deseos...
Yo además recibo mensajes deseándome un feliz cumpleaños. Un amigo me ha enviado este video, y me ha hecho llorar.
FELIZ AÑO NUEVO